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Augusto Monterroso plantea en su cuento "Uno de cada tres" una divertida opción hermana de la modernidad: rentar un espacio de 15 minutos diarios en cierto cuadrante radiofónico para "relatar nuestras desgracias al mundo".
Entre sus beneficios -por ejemplo- está el poder hacerlo de un sólo golpe a todos nuestros allegados (reduciendo considerablemente la cuenta telefónica); también podemos decorar nuestras cápsulas con piezas instrumentales y sobre todo, sacar de nuestro sistema esas amargas noticias que tanto quisiéramos platicar a todos y que tan pocos desearían escuchar en persona...
Los blogs, muchos años después, podrían funcionar de una manera parecida. Sin embargo, ahora podemos usar este maravilloso invento para quejarnos de la nueva pena moderna que tanto nos agobia:
Nadie lee nuestros blogs. :)